VIC - ANDORRA
Tal y como pensamos, dormimos apaciblemente tras una cena al fresco y un pequeño paseo.
Con la misma operación de ayer para ducharnos y un tendal improvisado, después del desayuno y la puesta a punto, nos dirigimos de nuevo a Vic. Allí nos esperaba Fran para enseñarnos la ciudad.
Todo el centro es peatonal por lo que aparcamos la furgoneta y recorrimos el casco histórico a pie.
Curiosas tiendecitas con escaparates preciosos adornaban las calles.
Era día de mercado por lo que aquello era un hervidero de gentes y puestos de todo tipo.
Caracoles! Cómo te gustarían, mamá!
Callejeamos disfrutando de los rincones, las fachadas.
Las calles me recordaban a Italia.
Y... Llegamos al TEMPLO ROMANO. No imaginaba que estuviera tan bien conservado. Descubierto en el año 1882 y posteriormente restaurado.
Qué maravilla! Lo disfruté y después pensé en mis alumnos.
Caminamos hasta la CATEDRAL. Me pareció majestuosa. Su fachada principal escondía el tesoro de su interior.
En la primera mitad del siglo XX se encargó la decoración de los grandes muros blancos al pintor catalán Josep María Sert. Un incendio en el año 1936 destruyó la obra de Sert y dañó las bóvedas y la cúpula.
En los años 40 se iniciaron las obras de reparación y el propio Sert llevó a cabo una nueva decoración que es la que hoy podemos contemplar.
Veintidós pinturas: "El Calvario", "El entierro de Cristo", "La ascensión al cielo", "La duda de Santo Tomás"... Verdaderas obras de Arte.
Comimos en Vic y tras una larga sobremesa de charla, selección de fotos, búsqueda de ruta y actualización del blog... RUMBO A ANDORRA.
Cruzamos Los Pirineos por Ripoll y La Seu d'Urgell. Menuda aventura.
Pueblecitos como Ribes de Freser.
Y subida por Toses.
Hasta 1790m de altitud. Allí una parada para una panorámica inolvidable desde el hotel.
La subida era pronunciada, con muchas muchas curvas y unos paisajes verdes llenos de abetos y pinos. Se respiraba tan bien...
Emprendimos la bajada con precaución.
No sólo había que ir con cuidado de las curvas, también de los "habitantes"del lugar.
Fontanals de Cerdanya y otros lugares hasta llegar a Bellver de Cerdanya.
Y ya casi llegando a La Seu, una parada para llamar a nuestras familias. En Andorra no utilizaríamos el teléfono e internet sólo en zonas wifi.
La carretera discurría sin subidas ni bajadas, como una culebra entre montañas. Comenzaba a caer el sol.
Cruzamos la frontera sin problemas de aduana. Íbamos con la idea de que nos pararían y subirían a la furgoneta tanto a la entrada como a la salida, pero en esta ocasión no fue así.
Cruzamos Andorra la Vella con destino al furgoperfecto en el que pasaríamos la noche, a unos 8km en lo alto de una montaña.
Muchas curvas y unas vistas magníficas de Andorra allá abajo. Impresionantes paredes de montaña abrazando las casas que se veían diminutas.
Y llegando ya casi al cielo...
... Descubrimos un paraíso natural.
Sabíamos que aquel sería el lugar perfecto para descansar. Paseamos y disfrutamos de la Paz.
Antes de que se hiciera noche y solos completamente, tuvimos tiempo de leer, charlar y escribir.
Se puede pedir más?
Para todos los que ahora estáis leyendo estas palabras, deciros que somos libres y felices: viajeros del mundo y maravillados ante rincones así.
Feliz día.
Todas las fotografias son preciosas de los sitios por donde pasais. Seguir iluatrandonos con vuestro viaje
ResponderEliminarUn beso
Muchas gracias, me siento feliz por poder mostraros desde esta ventanita la maravilla de este viaje.
ResponderEliminarMuchos muchos besos.